
En el mundo de las finanzas y las operaciones, la transparencia es esencial. Sobre todo cuando una empresa posee varias filiales, es importante ofrecer una imagen clara y completa de la salud financiera de todo el grupo.
Ahí es exactamente donde entran en juego los estados financieros consolidados.
¿Qué son los estados financieros consolidados?
Un estado financiero consolidado es un informe financiero en el que las cifras de una empresa matriz y sus filiales se combinan en una sola.
En lugar de estados financieros separados para cada entidad, la versión consolidada ofrece una visión global de la situación financiera, los resultados y los flujos de tesorería de todo el grupo como si fuera una sola empresa.
¿Por qué es necesaria la consolidación?
Imaginemos que un holding posee tres filiales. Cada una de ellas tiene sus propios ingresos, gastos, activos y pasivos. Si sólo se examinan los estados financieros de la sociedad holding, se pierde información crucial sobre la verdadera situación financiera del grupo. Al consolidar:
- Evitar la doble contabilidad, como las transacciones internas entre empresas del grupo.
- Obtener una imagen más justa de la solidez financiera del grupo.
- Cumplir las obligaciones legales, ya que la consolidación es obligatoria para las medianas y grandes empresas en muchos países.
¿Qué se consolida?
La elaboración de los estados financieros consolidados incluye la agregación de los siguientes componentes:
- Balance: activo, pasivo y fondos propios del grupo.
- Cuenta de pérdidas y ganancias: ingresos y gastos combinados.
- Estado de flujos de tesorería: flujos de entrada y salida de tesorería del grupo.
- Notas: información adicional sobre, por ejemplo, la estructura del grupo, las empresas asociadas y las políticas contables.
¿Cómo funciona en la práctica?
La consolidación suele hacerse en cuatro pasos:
- Identificación de las entidades a consolidar: suelen ser filiales en las que la empresa matriz tiene una participación de control (>50% de los derechos de voto).
- Eliminación de transacciones internas: como préstamos mutuos, ventas o pagos de dividendos.
- Políticas contables uniformes: todas las entidades deben utilizar las mismas políticas contables.
- Agregación de cifras: los datos financieros se suman y se presentan como una sola entidad.
¿Quién debe elaborar los estados financieros consolidados?
En los Países Bajos, las medianas y grandes empresas están obligadas a elaborar estados financieros consolidados, a menos que exista una exención (por ejemplo, si la empresa forma parte de un grupo mayor que ya consolida).
Las normas al respecto se establecen en el Título 9 del Libro 2 del Código Civil y en las Directrices para la elaboración de informes anuales (RJ).
Los estados financieros consolidados son más que un requisito administrativo. Es una poderosa herramienta para que inversores, prestamistas y otras partes interesadas comprendan la verdadera situación financiera de un grupo de empresas.
Para los empresarios, también significa una oportunidad de dirigir estratégicamente sobre la base de una visión financiera completa.